31/12/09

El 2010 ya está aquí



Faltan pocas horas para que haga su entrada un nuevo año, el 2010. La verdad es que no soy de las que se emocionan la noche del 31 imaginando que al día siguiente su vida va a cambiar por completo, ni de las que se llenan de buenos propósitos que olvidan una semana después, ni siquiera de las que comienzan a recordar con añoranza las vivencias del año.
Al final del año no recuerdo la mayoría de las cosas que he hecho, sólo las más recientes o aquellas que han sido especialmente relevantes. En cualquier caso este año ha sido bueno, no ha habido grandes cambios sino una especie de transición lenta pero constante. Supongo que todos evolucionamos y crecemos como persona a medida que pasa el tiempo, y este año ha sido para mí un año de evolución.
Sí que es cierto que no puedo dejar de mirar con ilusión el nuevo año, con incertidumbre y con ganas. Obviamente no va a cambiar nada de la noche a la mañana, pero es el día 31 cuando parece que se abre una brecha en el espacio-tiempo (acentuada por el horario festivo que a todos nos disloca) y creemos que el cambio es algo que está a la vuelta de la esquina, como si llevara todo el año esperando para manifestarse. Quizás sea simplemente que en estas fechas parece que los acontecimientos pasados son sólo eso, pasado. Yo creo que el pasado está presente en el presente (y en el futuro), porque lo que hacemos planta los cimientos de lo que luego podremos llegar a hacer. No me desagrada esa idea de que en un día uno reflexione acerca de lo que ha hecho a lo largo de todo el año, pero creo que es algo que debería hacerse todos los días y no una vez al año.
Por eso prefiero no hacer balances, ni poner el contador a cero...simplemente la vida sigue adelante pero con un calendario diferente. Sin embargo me gusta esa ilusión que muestra la gente con la llegada del nuevo año, todo el mundo se renueva por dentro o parece mostrar más interés por cambiar a mejor; una pena que luego (la gran mayoría) vayan perdiendo ese espíritu a lo largo del año. Prefiero sentir esa ilusión día tras día, mañana tras mañana. A veces me pregunto cómo sería todo si cada mañana despertáramos con esa ilusión, con esas ganas de cambiar, de enmendar lo malo o reflexionando sobre lo que hemos aprendido.
Os deseo un Feliz 2010, pero sobre todo que no perdáis a lo largo del año lo que habéis aprendido ni vivido, que el único momento en el que el contador marca 0 es cuando ya no se puede seguir andando por este suelo.



6 comentarios:

Felipe Medina dijo...

Nos empeñamos en trocear el tiempo y nos engañamos soberanamente.
Los calendarios,los años,los siglos...son sólo particiones 'administrativas'de la existencia.
El tiempo no admite medidas,ni 'cachos'porque es ad infinitum.Y es que claro,el ser humano,en su manía de controlar todo,quiere contralar también el tiempo.
No se va nada ni viene nada.Todo es permanencia.
Medimos para no dispersar,para saber que una arruga es producto de los 'años',aunque en realidad el ser humano es sólo un 'poducto'efímero al que le ponemos permanencias,no así al tiempo.
De todas formas te deseo lo mejor hoy y siempre

Ciberculturalia dijo...

Es cierto la reflexión que haces y el comentario de Felipe. Tambiés es verdad que no esta nada mal añadir algo de magia, de emoción, de cariño a lo coitidiano, a lo diario. Yo al menos así entiendo todo esto.
Te deseo un año en el que te encuentres satisfecha y llena de proyectos.
Un abrazo

Napoleón dijo...

Ola...Pasaba para desearte un venturoso 2010, que todos tus proyectos y sueños se abran paso entre todo y se logren concretar.

Saludos...

severino el sordo dijo...

Yo a nivel individual no soy de los que hacen propositos para comenzar el año ya tuve todo uno enterito para cambiar eso si a nivel colectivo si que espero con esperanza que cada año que entra sea algo mejor que el que se va,en cuanto a las divisione administrativas que dice Felipe no he acabado estos dias de asueto y ya estoy pensando en la fiesta siguiente ,cosas del amor al trabajo por cuenta ajena,feliz 2010.

Duende Crítico dijo...

Feliz 2010. Como dices, el ser humano se dedica a marcar pausas o divisiones que resultan un poco artificiales. Todo es más fluido.

Un saludo.

Lia dijo...

Wenas!!

FELIPE: estoy de acuerdo contigo, el tiempo es sí es infinito, sin particiones. Es el hombre el que lo ha fragmentado en su afán de control. Me gustan tus palabras: el hombre es un producto efímero; muchas veces no somos conscientes de ello.
Igualmente te deseo lo mejor, ahora y siempre.

CIBERCULTURALIA: me gusta la magia en lo cotidiano, sin ella la vida sería muy monótona.
Lo mismo te deseo a tí.

NAPOLEÓN: lo mismo te deseo, que tus sueños y proyectos se cumplan.

SEVERINO: la esperanza en el cambio a mejor es común a todos. Esas divisiones del tiempo supongo que intentar aportar un cierto control de lo que hacemos, a veces es bueno pensar que no existen, que hay cosas que hacemos que escapan a ese control.

DUENDE CRÍTICO: Feliz Año a ti también. La vida es mucho más fluida que un calendario, sí.

Gracias a los cinco por vuestros comentarios!!
Saludos!!