28/4/10

La decadencia universitaria.



Ayer un compañero hablando sobre la precariedad laboral juvenil sacó a relucir el tema de la educación universitaria, y una de sus frases me impactó :"la Universidad de ha convertido en una mera máquina expeditiva de títulos" Una de las frases más ciertas que he escuchado últimamente.

Durante mis años de instituto tenía la impresión de que la universidad era el lugar donde la educación era libre, donde el debate estaba en las aulas y los estudiantes eran críticos. El lugar donde uno no se limita a memorizar cuatro líneas sino a interesarse por los temas que le tocan, en definitiva una educación crítica. Sin embargo, desterré ese pensamiento a los pocos meses de llegar allí. Mi primera impresión de la universidad fue que la gente no estaba interesada en lo que estudiaba, no iban a clase o acudían por obligación, estudiaban para aprobar y evitaban realizar cualquier trabajo de investigación. Me llamó la atención la Facultad plagada de carteles de Barriles y propaganda varia.

Pocos profesores tienen un metodo didáctico participativo y en el que se de pie al debate, aunque es comprensible dado que a los alumnos no les interesa y no participan. Recuerdo clases en las que se plantearon debates que fueron cortados en pocos minutos porque nadie intervenía, algo desolador. Nadie parece tener opinión sobre nada, y si la tienen no la expresan en voz alta porque no interesa. Parece extraño, pero es cierto, en muchas clases tienes ganas de opinar y no lo haces porque sabes que ni a tus compañeros ni al profesor le interesa tu opinión.

A mi parecer, y creo que muchos compartirán esta opinión, la educación universitaria ha decaido hasta tocar fondo, más si cabe con la implantación del plan Bolonia. No comento sus aspectos negativos (más que consabidos y repetidos) sino los considerados positivos, como es el caso de la asistencia obligatoria y clases más reducidas con trabajos de investigación en grupo. Aspectos de una enseñanza adecuada (aunque el método de asistencia obligatoria no me parece la mejor manera de lograr interés por parte del alumno, sino todo lo contrario, que lo vea como una carga) que podrían incluirse en el ámbito universitario sin necesidad de Plan Bolonia.

Pero el problema del desinterés es algo que viene de mucho más atrás, ya en el instituto las clases no son propicias al debate, se quieren alumnos modelo que no den ruido ni quejas y no alumnos críticos. Es un modelo de enseñanza que ya se ha probado que no funciona, con unas tasas de abandono enormes y con una formación mediocre. No se incentiva al alumno a interesarse por la realidad, a investigar un tema cercano ni  a observar los problemas desde varios frentes; en lugar de ello todo se ve desde las frías páginas de un libro. Se crea la idea de que todo está ya montado, hecho y resuelto, de que nosotros no hemos de hacer nada porque ya está hecho por otros. La historia no se usa para demostrar que con empeño los logros resultan cercanos y posibles sino para inculcar la idea de que todo está conseguido y que eso pertenece al pasado, en el presente tenemos todo lo que deseamos. La filosofía no se orienta como una disciplina apasionante, como la sabiduría de hombres adelantados a su tiempo que supieran mirar con ojos nuevos lo conocido; sino como la ideas locas de cuatro viejos que no sirven para nada porque no son exactas, no son ciencia sólo divagaciones. Así puedo seguir y seguir con todas las asignaturas pasadas, presentes y futuras de mi vida (siempre hay excepciones, mis profesores de Filosofía e Historia no impartían clase de esta manera estática, pero yo no supe apreciar a tiempo la enorme calidad de la enseñanza que recibía).

Esto nos lleva a lo que hay hoy y probablemente mañana, ciudadanos pasivos y desisteresados que se dejan controlar por el político de turno. Quién no tiene opinión y no conoce los problemas sociales es muy fácil de manipular. Nos estamos amoldando y dejando amoldar a las reglas de un sistema para el que sólo somos fichas que usar. La educación es la base de una sociedad y más aún de una sociedad equitativa, crítica y fructífera; y es evidente que la nuestra lleva tiempo fallando. Parece demasiado pedir que los políticos se pongan de acuerdo para crear una ley de educación estable, adaptada a las necesidades de todos y que no vaya a ser derogada de aquí a dos años. Mucho del mal viene de ese cambio constante de leyes de educación; el otro tanto viene de nosotros mismos, de la educación que recibimos, damos y daremos. Muchos habrán inculcado a sus hijos esa máxima de "el día de mañana sólo serás algo si tienes estudios" que da lugar al estudiante desinteresado y que pasa por la Universidad para conseguir su título y no para aprender. De hecho a mi siempre me repetían eso, y lo entiendo porque mis padres se han esforzado mucho para que yo puedo económicamente estudiar, pero no me sirvió. Me sirvieron las conversaciones de sobremesa en familia sobre política y actualidad mundial, los debates con los amigos sobre temas sociales, los actos culturales...todo aquello que abrió mi mente a una realidad que me era ajena. Aprender, simplemente eso, despertó mi interés por el mundo de alrededor, darme cuenta de que no era problema de otros sino MI problema también. Y creo que eso es precisamente lo que brilla por su ausencia, la cercanía a los problemas sociales y la capacidad de ponerse en el lugar de otro. Porque sabemos lo que ocurre en cada rincón del mundo pero nos es indiferente, nos parece lejano; sólo cuando nos toca nos movemos (y últimamente ni así). El problema nace de una educación deficiente en todos los ámbitos: familiar e institucional.

No dejemos que los centros de educación se conviertan en meras máquinas expeditivas de títulos. La educación no es un libro abierto sino una realidad abierta, conocida y compartida por todos. Concluyo sin nada que no sepamos ya, esa ley es necesaria y debemos pedirla por activa y por pasiva.


10 comentarios:

Moral y Política dijo...

Lía es triste esa situación. Es la vía al decaimiento total de la enseñanza pública. Poco a poco se irá pagando y mas tarde sus títulos, siguiendo ese camino seran papel mojado. Dirigiran el mundo ya casi lo dirigen los que han estudiado ene l extranjero en universidades de prestigio y aquí las universidades privadas, funcionaran las capillas y lso grupo para cooptar a los que corten el bacalao en el futuro. los licenciados de la pública a percibir los mil euros y vale.

¡Ánimo!

saludos,

soy beatriz dijo...

Por desgracia (o por deliberada conveniencia) la educación pública está siendo atacada por distintos sectores y de distintas formas.
Acá lo vivenciamos en todos los niveles de la misma.
Triste realidad.
Un abrazo y un beso.

Felipe Medina dijo...

Empiezo diciendo que me encanta el vídeo de Queen.

Desde siempre la Universidad ha sido fuente de conocimiento y del saber y dónde el razonamiento ha alcanzado sus argumentos más álgidos.

De la Universidad han salido los mejores filósofos y científicos y la discusión e interrogación ha sido su constante.

Con el Plan Bolonia se pierde toda la riqueza del pensamiento porque las Humanidades quedan de lado.

Lo que fuese fuente del conocimiento se ha convertido en formar personas para el mundo del trabajo empresarial y a disposición del mundo productivo según vayan indicando las empresas.

La universidad pública siempre ha sido de las mejores y lo que ocurre ahora es un problema más de los que constantemente vemos en la sociedad.¿Por qué la Universidad iba a ser distinto?

Creo en la Universidad Pública y no en la Privada.Es cuestión de los estudiantes y de su esfuerzo y compromiso.

Saludos

El Edukador dijo...

AINSSS! que identificado me siento con todas las ideas que magistralmente desarrollas en la entrada!

Yo también pensaba exactamente igual que tú al entrar este año en Derecho, que lo que la universidad iba a supooner era tomar contacto con muchos alumnos cultos y críticos, ansiosos por aprender, por exponer sus ideas, pensaba que se formarían en clase enfervorizados debates sobre un amplio caleidoscopio de temas donde se expresaran opiniones diversas e interesantes, en fin, ese lugar donde la cultura llegara a su máxima expresión. Y me encuentro esto.

Gente sin ideas, apatía, debates en los que nadie opina (es miedo a dar la opinión o es que no se tiene?)alumnos acríticos, que solo piensan en fiesta, fiesta y más fiesta, botellones de fin de semana, y los pocos que opinan tienen unas ideas terroríficos... parece una sociedad en la que han calado muchos principios conservadores, yo me he llevado una auténtica decepción con la universidad y con mis compañeros. Fíjate, el otro dia de camino a clase iba comentando con un amigo el intento de reforma fiscal por parte de Obama, cerca nuestra estaban dos compañeras de mi clase muy calladas escuchandolo todo y se reian como si fueramos monstruos, desde luego que no fue el momento en el que me di cuenta de como eran mis compañeros, simplemente fue el momento en el que me reafirmé en el hecho. A esta sociedad sin ideas no le pronostico ningún futuro alentador.

En fin, puedo certificar la defunción de la universidad.

Lia dijo...

Wenas!!

MIGUEL ALVAREZ: la situación es desoladora, porque la universidad pública era una vía de acceso para la gente que no tenía mucho dinero y no sólo se está comenzando a privatizar y mercantilizar sino que se está rebajando la calidad de la enseñanza. Cómo tú dices terminarán dirigiendo el mundo los mismos de siempre, y con ello continuarán pisoteados también los mismos. Gracias por los ánimos, porque vamos a necesitarlos.

BEATRIZ: apunto más a la deliberada conveniencia que al azar en esta cuestión, no interesa que lleguen a optar a grandes cargos personas de origen humilde porque sus reivindicaciones se orientarán hacia el lado de la balanza que no les interesa.

FELIPE: estoy de acuerdo con tus perspectivas sobre el plan Bolonia, el fin es proporcionar trabajadores al mercado. No se puede lograr el compromiso de los estudiantes cuando su indeferencia ante la implantación del plan es palpable. La universidad deberian ser los estudiantes y docentes que la forman; el concepto propio de universidad ha variado.

EL EDUKADOR: muy cierto eso de que los pocos que opinan tienen unas ideas terroríficas, he llegado a escuchar de boca varios compañeros que IU pretende quitar las tierras a los ricos y repartirlas o incluso que habría que reeducar a las personas de etnia gitana antes de darles un piso de protección oficial (creo que no es necesario decir nada más). Los valores conservadores han calado en mucha gente joven, y es algo que nunca llegaré a comprender, unas nociones de historia les vendrían muy bien para sacarlos de esa profunda ignorancia.

Gracias a los cuatro por vuestros comentarios!! Saludos!!

Anónimo dijo...

Lia,...ya sabes...hagamos posible lo imposible.
Yo vivo en Alemania, soy profesora en la universidad. Los grupos se han reducido mucho con el plan Bolonia, no controlamos la asistencia,-tampoco hace falta,vienen-.
La participación de los alumnos en todo es total. Mañana lunes tienen una asamblea en el patio de filología, se preocupan del funcionamiento de las cosas,hablan con la decana, se manifiestan con propuestas muy concretas.
Nosotros recibimos siempre sus correos con invitación a participar en sus asambleas, una carta con los puntos que van a debatir. Y en el caso de que haya algún tipo de protesta, nos avisan.
Es una cuestión de formas, pero las formas son importantes.
No se puede esperar una "revolución"por parte del profesorado. Nosotros también llevamos nuestra "lucha" privada por mejorar ciertas situaciones, hacemos un seguimiento personal del estudiante. Tenemos 2 horas de consulta/tutoría a la semana y los atendemos por e-mail.
La carga lectiva es muy grande y, para los/las que nos gusta la docencia, eso es lo primero.

P.S: Bukowski no es un buen ejemplo a seguir. jajajaja

Besitos

Ciberculturalia dijo...

Querida Lia, me preocupa lo que cuentas. Creo en la Universidad como hacedora de las mentes futuras que señalaran los caminos, en cualquier campo. Como base para el conocimiento y la innovación. Si esto no se da, es un gravísimo problema.
Sigo ahora las dificultades para el pacto de estado en la educación...
En fin, ojalá, la universidad no se contamine de la mediocridad que últimamente se ve en tantas y tantas esferas de la vida pública.
Un beso

Rubén dijo...

Como docente de instituto solo puedo darte la razón. La educación cada vez va a peor y los políticos no hacen nada por remediarlo, parecen no darse cuenta que el futuro del país reside precismante en las aulas. Somos muchos los que intentamos hacer de nuestras clases algo diferente, un lugar para el descubrimiento y la "acción neuronal" (así lo llamo yo) pero es complicado cuando ni la ley, ni tus compañeros, ni los propios alumnos ven con buenos ojos las novedades en la práctica docente.
Un abrazo y sigue así

Anónimo dijo...

Además, ya tenemos la primera promoción de la reforma con los estudios acabados.
Llevamos cinco años reformando los módulos de los planes de estudios; ahora estamos con el ciclo de Master. Son muchas horas de trabajo, y muchas discusiones.
Pero yo quiero ser optimista, es algo importante lo que está ocurriendo. Participamos directamente en un plan universitario europeo conjunto. Eso ya en sí es revolucionario.
Es importante dar pasos pequeños, controlar el proceso,participar.

Lia dijo...

Wenas!!

MITA: por lo que cuentas la universidad allí difiere mucho de lo que es aquí. En España, entre otras cosas, al parecer no se está aplicando bien el Plan Bolonia y está llevando a que la calidad de enseñanza de algunas facultades se reduzca. Entiendo que los profesores realizáis un gran esfuerzo para que todo salga adelante, pero creo que aquí falla principalmente el alumnado ycon su actitud acrítica. Me ha gustado tu aportación, conocer la realidad universitaria y del mismo Plan en otro país.
P.S: Cierto que Bukowski no es muy buen influencia, pero me gusta su manera descafeinada de ver la realidad. Para llegar a conocernos realmente hemos de explorar nuestros vicios, como él hizo.

CIBERCULTURALIA: los estudiantes son una parte primordial de la universidad, y cuando éstos son conformistas y acríticos es díficil que no se contagie de mediocridad todo el conjunto. En la Universidad terminan culminando todos los fallos del sistema educacional.

RUBÉN: me gusta tu expresión de la "acción neuronal". El instituto es una etapa importante de nuestras vidas, ahí es donde van cociéndose nuestros intereses y es importante tener profesores que sepan estimularlos. Por lo que conozco de ti sé que formas parte de esos docentes que intentan estimular a los alumnos e interesarlos, es una gran labor.

Muchas gracias a los tres por vuestros comentarios!!
Saludos!!