El mundo es nuestro, para amarlo o para odiarlo; para destruirlo o para cuidarlo. Es en nuestras manos donde está posado el destino no sólo del mañana sino de los que vivirán entonces, no sólo de nuestra especie sino del resto de ellas. Es una gran responsabilidad la que pesa sobre nosotros, y sin embargo todos preferimos dejarla en manos de quienes creemos que están más capacitados o habilitados para hacerse cargo: gobiernos, autoridades internacionales, ONG's...sin percatarnos de que poco podrán hacer estos si no somos nosotros los que nos movemos. Pocas veces pensamos que los gobiernos no son más que gente como nosotros, con una autoridad (es cierto), pero educados de la misma forma. Sólo son como tú o yo pero con un traje de chaqueta; su mentalidad es la misma que la del resto de la sociedad, ese es el problema.
Y es que el fallo en este sistema, que tantas desigualdades crea y que tan poco gusta a todos, es precisamente su mentalidad. No hablo del sistema capitalista, ni de ningún sistema concreto, simplemente del sistema social, del que creamos todos y cada uno de nosotros (y del que por tanto somos culpables todos). Hablo de un sistema que se rige por la norma suprema de la comodidad y del consumo; donde cada una de sus directrices están marcadas por el inconformismo, la hipocresia, la avaricia y la injusticia; donde para que unos vivan bien otros tienen que morir.
Un sistema donde el trabajo no se considera un servicio social, una manera de contribuir al beneficio colectivo a cambio de una remuneración; sino ocho horas tortuosas perdidas para hacer algo inútil. Ningún empleo es inútil, el puesto de trabajo de cada uno (desde el barrendero al médico, pasando por el funcionario) es necesario socialmente, para que todos podamos vivir mejor y ayudar a que otros vivan igualmente mejor.
Un sistema donde el medio ambiente se destruye o en el mejor de los casos de manipula a nuestro antojo; donde miles de especies perecen para que podamos tener carreteras, edificios...; donde los animales son tratados sin piedad ni respeto.
Un sistema donde los derechos se basan en el dinero, porque quién no tiene dinero no tiene derecho a sanidad, educación, alimentación...
Un sistema donde las fronteras entre nosotros las trazó un hombre en un mapa. Sólo son simples líneas, pero nacer a un lado o a otro de ellas puede suponer la vida o la muerte.
Un sistema donde se buscan en las diferencias entre nosotros, ya sean religiosas, ideológicas, raciales...,en vez de considerarse en qué somos iguales.
Un sistema donde el tener lo es todo y el dinero te habilita para comprarlo, de modo que los que no lo tienen ni son nada ni podrán nunca serlo.
Un sistema donde el que tiene siempre quiere más y jamás se plantea que puede ayudar a otros con el dinero que no necesita.
¿Y nos seguimos preguntando que es lo que falla en la política? Nosotros...que somos los que tenemos el mundo en las manos. Nosotros que votamos y que somos los políticos.
Mientras educemos a nuestros hijos en el consumo y el bienestar seguirá siendo así, mientras las injusticias nos parezcan un mero problema al otro lado de la frontera seguírá siendo así; mientras nuestra máxima aspiración sea consumir seguirá siendo así...
Volvemos a un tema eterno, yo sola no voy a cambiar esto; pero al menos espero que estas palabras repiquen en vuestra cabeza, que vuestros temas de conversación pasen de lo cotidiano y sean acerca de la miseria que hay en el mundo, que nazca entre todos una conciencia, que cambie algo...
Podemos aspirar a un mundo mejor...
6 comentarios:
Lia, brillante.
Es una estupenda entrada, de verdad.
estoy de acuerdo con la idea de fondo totalmente.
Ha sido un placer leerte.
Un saludo.
Salud y República!!
Nexus.
Debemos aspirar a un mundo mejor
Todo ser humano, por el hecho de serlo, lleva impreso un deber inalienable con el resto de seres vivos(no sólo seres humanos)
Está en nuestro genoma el saberse deudor de vida.
El ser humano estará siempre incompleto en su concepción antropológica sino es capaz de darse para construir un mundo mejor
Besos
Amiga, muchas felicidades, has plasmado en letras los pensamientos mas hondos y dificiles de sacar.
Es cierto que nuestro futuro solo esta en nuestras manos, pero.....es tan comodo sentarnos a esperar que otros den el primer paso, que otros se mojen antes que nosotros, que otros tomen las decisiones dificiles por nosotros....que el mundo seguira girando y esperando.
Un fuerte abrazo.
Salud y felicidad
si,realmente el cambiar esto esta en nuestras manos pero no debemos de olvidar que somos rebaño,y que nos conducimos a golpes de liderazgos,pero podemos contribuir con pequeños gestos que pueden ayudar e intentando educar a nuestros hijos rn valores diferentes,muy de acuerdo en esta estupenda entrada,ya sabes que pienso que si las nuevas generaciones lo tuvieran tan claro como tu ,el futuro seria algo menos negro,saludos.
Preciosa entrada que provoca mucha reflexión.
Yo también creo que el mundo es nuestro y que tenemos mucha más capacidad de influir en él de la que nos imaginamos. A veces el pensar que todo nos viene dado no es más que un subterfugio para no hacer, para la inacción.
Así es que abogo por la "acción"
Un beso
Carmen
Wenas!! Al volver a leerla hoy me he dado cuenta de que puse "inconformismo" en vez de "conformismo" (al final del segundo párrafo), perdonad que no me diera cuenta antes.
NEXUS: muchas gracias!! Lo cierto es que escribí la entrada después de haber tenido un día díficil, estaba bastante decepcionada con todo lo que había a mi alrededor. Igualmente es un placer leerte a ti.
FELIPE: estoy totalmente de acuerdo con tus palabras, tenemos el deber de ayudar a los que comparten este mundo con nosotros, si eso fuera algo que todo el mundo tuviera claro probablemente seríamos más solidarios y todo iría mejor.
NAVEGANTE: muchas veces necesito desahogarme y escribir cosas como estas para no volverme loca de impotencia, sigo sin entender porque la gente es tan pasiva. Va siendo hora de despertar del letargo e intentar arreglar el mundo antes de que se vaya al garete.
SEVERINO: lo de que somos un rebaño es totalmente cierto, pero igual que tiene su lado negativo también puede explotarse el lado positivo. Los pequeños gestos son los que poco a poco van creando el cambio, creo que es muy importante educar a las nuevas generaciones desde otro punto de vista, enseñarles a pensar y a ser críticos.
CIBERCULTURALIA: siempre se dice aquello de "el poder es del pueblo" y no sabemos hasta que punto es cierto. El problema de muchas personas (sobre todo de la juventud) es que lo tienen todo, y por eso no aprender a luchar para ganar algo. Siempre es más fácil que otros hagan. Yo también abogo por la acción.
Muchas gracias a los cinco por vuestros comentarios!! Que paséis una buena semana!!
Saludos!!
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